Analisis Tecnico
Huecos
Los huecos son un rango de precios entre dos barras o velas consecutivas en el que no se han cruzado operaciones de compra-venta. Muestran un desequilibrio brusco entre la oferta y la demanda. Podemos ver un ejemplo de dos huecos en la Imagen 5.
Imagen 5: Huecos en la apertura.
Ibex35. Gráfico 5 min. 24 y 27 de octubre de 2008.
Como podemos observar, el Ibex35 cierra el día 23 de octubre de 2008 en 8811,2 puntos, y comienza a cotizar al día siguiente en 8445,0 puntos, lo cual supone un escalón de 366,2 puntos, en este caso de bajada. Lo mismo sucede al día siguiente, el Ibex35 cierra en 8353,2 puntos, y abre al día siguiente en 7977,0 puntos, suponiendo un total de 376,2 puntos en los que no se cruzó ninguna operación.
Los huecos entre el final de un día y el comienzo del siguiente suelen producirse debido a alguna noticia o hecho extraordinario ocurrido, mientras el mercado estaba cerrado, y que no se pueden reflejar en las cotizaciones de los valores hasta que no se abre el mercado. Puede ser una bajada de tipos de interés por sorpresa, un resultado de una empresa mucho mejor o peor de lo esperado, un atentado, etc.
Existen cuatro tipos principales de huecos:
- Huecos normales: Se cierran al poco tiempo de producirse y no tienen mucha importancia sobre la tendencia que existía en el mercado justo antes de producirse. Probablemente el hecho que los originó no es tan importante como en principio consideró el mercado. Normalmente se dan en mercados laterales. Son los menos importantes de todos los huecos, pero los más habituales.
- Huecos de escape: Suponen el inicio de una nueva tendencia, el paso de una tendencia lateral a una alcista o bajista, dependiendo de la dirección en la que se haya producido el hueco. En este caso, el hecho que lo originó es importante, y va a suponer el inicio de una tendencia que puede durar mucho tiempo. Estos huecos no suelen cerrarse en las siguientes sesiones, aunque en ocasiones sí lo hacen, y no por ello pierden su validez.
- Huecos de continuación: Se producen en medio de una tendencia fuerte, en la misma dirección de la tendencia. Por ejemplo, un hueco alcista en medio de una tendencia alcista. Son una indicación de que la tendencia es muy fuerte.
- Huecos de agotamiento: Se producen al final de una tendencia, generalmente fuerte, y suponen que el final de dicha tendencia está cerca. Se producen en la misma dirección de la tendencia, por lo que pueden confundirse fácilmente con los huecos de continuación.
Los huecos de escape, continuación y agotamiento suelen producirse con volúmenes de contratación altos.
Tendencia
Como recoge el segundo principio del análisis técnico, el precio se mueve en tendencias. La tendencia, en el análisis técnico, es la dirección o rumbo del mercado durante un cierto periodo de tiempo. Pero esto no nos basta, ya que en un mercado con tendencia alcista, el precio no siempre sube, así como en un mercado con tendencia bajista el precio no siempre baja. Es decir, el precio no se mueve en línea recta, sino que se caracteriza por un movimiento en forma de zigzag. Estos impulsos tienen el aspecto de olas u ondas sucesivas con sus respectivas crestas y valles. La dirección de estas crestas y valles es lo que constituye la tendencia del mercado, ya sea vayan al alza, a la baja, o tengan un movimiento lateral.
En la Imagen 14 podemos apreciar cómo el Euro/Dólar mantuvo una tendencia bajista de 1999 a 2000 (línea A), al igual que durante el 2005 (línea D). De finales de 2000 a 2002 mantuvo una tendencia lateral (línea B). Se observan dos períodos de tendencia alcista en la cotización, el primero entre 2002 y 2004 (línea C), y el segundo a partir de enero de 2006 (línea E).
Imagen 14: Tendencia Alcista-Bajista-Lateral.
EUR/USD. Enero de 1999 – Julio de 2006.
Estas líneas se llaman líneas de tendencia, y no se pueden trazar de cualquier modo, en cuyo caso pueden convertirse en algo contradictorio o no dar niveles de referencia claros. Una línea de tendencia alcista se traza tangente a los mínimos ascendentes, mientras que una línea de tendencia bajista se traza tangente a los máximos descendentes. Sabemos que dos puntos cualesquiera definen una línea recta, por lo que los dos primeros máximos, o mínimos, permiten proponer una línea de tendencia, que se debe prolongar a la derecha indefinidamente. Una línea de tendencia trazada desde el origen de un movimiento que pasa sólo por una corrección intermedia no es muy fiable. Es mucho más fiable trazar una línea de tendencia entre dos correcciones sucesivas. Esta línea de tendencia se conoce como línea de tendencia tentativa, y se requiere que haya un tercer mínimo que confirme la línea propuesta como confirmación. A partir de ese momento se convierte en una línea de tendencia válida, teniendo gran valor para el análisis técnico. Se confirma que el precio tenderá a moverse en la dirección de la tendencia, y con una determinada “velocidad”. Es decir, cuanto más pronunciada sea la línea de tendencia, la tendencia del precio es a moverse más rápido. Además, nos indica el posible fin de los períodos de retroceso de más corto plazo o, en el caso de que la línea de tendencia sea perforada, nos señala que la tendencia está cambiando. En una tendencia lateral, los máximos relativos alcanzan un precio aproximadamente igual; lo mismo sucede con los mínimos relativos. Si trazamos una línea recta horizontal tangente a los máximos y otra a los mínimos, tendremos acotada la tendencia lateral. En la Imagen 15 podemos ver un cómo el índice Dow Jones Industrial mantuvo dicha tendencia durante casi 20 años, de 1963 a 1982.
Imagen 15: Tendencia lateral.
Dow Jones Industrial. 1953 – 1985.